Nueva York está plagado de ellos. Las limos se basan en él y los hay cortos, largos, semi-limo y super largos. Su principal argumento de venta era que tenía motor V8 "fitted as standard", cuero hasta el techo y un confort conseguido a base de ruedas de balón y suspensión hiper suave. En resumen, un bote.
Una versión más barata es el Ford Crown Victoria, taxi y patrullero por antonomasia en la costa este y una ligerisisisisimamente "deportiva" es el Mercury Grand Marquis, que aún sigue a la venta aunque sus emisiones no superen ni la Euro-0.
A lo que vamos. El espacio en estos coches está dentro... y no precisamente en el maletero! Entre el tanque de 30 galones y la rueda de repuesto, este es el espacio que queda para una silla infantil que entraría sin problemas en un Citroën C1.
No hay comentarios:
Publicar un comentario